MÁS FEO QUE PICIO

Para ponderar la fealdad de alguien suele decirse que es «más feo que Picio», a quien de feo que era le dieron la unción con una caña, por lo asustado que estaba el cura, añaden los andaluces.Sbarbi, en su Gran Diccionario de Refranes, afirma que Picio era un zapatero natural de Alhendín, y que vivía en Granada en la primera mitad del siglo pasado. Fue condenado a la pena de muerte. Hallándose en capilla recibió la noticia del indulto, y le causó tal impresión que se quedó sin pelo y con la cara tan deformada que pasó a ser citado como modelo de la fealdad más horrorosa.De Andalucía procede también la comparación: «Más feo que el sargento de Utrera.»

marzo 15, 2012

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *